Berlín, 1 jun (Prensa Latina) El Banco Central Europeo (BCE) podría reforzar esta semana su programa de emergencia para limitar el impacto económico de la Covid-19, señaló hoy un comunicado.
Ello está previsto para el jueves, añade la nota, en un contexto en el que los gobiernos europeos buscan una respuesta común.
Tras una salva de medidas excepcionales en marzo, cuando Europa se enclaustró para frenar la crisis sanitaria, la institución dijo estar dispuesta a hacer más, frente a esta crisis inédita.
Según analistas y medios, el camino más evidente es aumentar el programa de emergencia del BCE contra la pandemia (PEPP), anunciado en marzo y dotado de 750 mil millones de euros hasta finales de año.
Este dispositivo, cuya flexibilidad permite concentrar los esfuerzos en ciertos períodos o en determinados países, es el preferido del BCE para limitar los estragos económicos del nuevo coronavirus, señaló el gobernador del Banco de Francia, François Villeroy de Galhau.
El BCE compra un promedio de 26 mil 500 millones de euros de deuda a la semana. Si sigue a este ritmo, agotará la dotación total a principios de octubre, calcula Andrew Kenningham, de Capital Economics.
Para este economista la institución de Fráncfort aprieta fuerte y prevé agregar como mínimo medio billón de euros (555 mil millones de dólares) al PEPP.
Asimismo, el programa debería prolongarse hasta septiembre de 2021, agrega Frederik Ducrozet, estratega de Pictet Wealth Management, pues queda claro que la recuperación llevará tiempo.
El Consejo de Gobernadores del BCE analizará también la cuestión, tanto técnica como política, de la llamada Llave de repartición de sus compras según la parte de cada Estado miembro en su capital, opina Fritzi Köhler-Geib, economista jefa de KfW.
Los reportes indican que el jueves, en su comparecencia ante la prensa, la presidenta del BCE, la francesa Christine Lagarde, tendrá en sus manos un nuevo juego de previsiones macroeconómicas hasta 2022, evaluación muy esperada.